Rafael Díez Piñeyro

6 de Julio de 1997

¡Ya vienen los cambios!

Concluido el proceso electoral del 2013 y terminado el periodo vacacional del presente verano, con renovados bríos y con la mente despejada por el prolongado descanso muy pronto la sociedad civil tamaulipeca conocerá los nombres de quienes asumirán nuevas responsabilidades.
Los alcaldes salientes aspiran a seguir en la nómina ya que les será ahora muy difícil continuar con el mismo ritmo de vida ya sin el respaldo del erario municipal.

Los diputados que abandonan el arduo trabajo legislativo, no es broma, extrañaran el jugoso sueldo que recibían ¡por no hacer nada! Pero ya existen algunos que esperan ser llamados a la mesa del Señor.
Quienes aspiraron a un puesto de elección popular y fueron derrotados por la fuerza del voto, ahora suplican una chambita, aunque sea de Subsecretario, para pagar lo gastado en la campaña.

Sin olvidar a quienes manejaron a candidatos con falsas encuestas y engañaron a dirigentes partidistas y a quienes los sostenían económicamente.
En este tema se han dicho y escrito muchas historias, el criminal despilfarro de dinero público para comprar aduladores profesionales que fracasaron en su intento de descalificar candidatos que terminaron imponiéndose porque al pueblo ya no se le puede engañar y mucho menos manipular para votar por candidatos descalificados.
La sociedad civil tamaulipeca sabe y conoce quienes son los medios de comunicación que pueden ser manipulados y comprados por la fuerza del dinero.

El pueblo de Tamaulipas tiene perfectamente identificados a quienes sirven en procesos electorales y se venden por unas monedas. Ya es hora que esos vividores sean desenmascarados y sean castigados retirándoles la confianza depositada y separarlos del cargo público que ahora detentan.
Ya lo hemos afirmado y ahora lo subrayo, la fábrica de nuevos ricos sexenales al amparo de los cargos públicos debe de terminarse, el pueblo de Tamaulipas así lo expresó y decidió en la contienda electoral del pasado julio.

Sólo un ciego y sordo no está consciente del reclamo popular.
Nunca más se deberá repetir lo del reciente pasado, donde los gobernadores convertidos en virreyes saquearon impunemente en beneficio de familiares, socios y cómplices las arcas públicas.
La transparencia, la rendición de cuentas y el informe puntual y claro de quien maneja el dinero del pueblo debe de ser una obligación de los servidores públicos.
La clase gobernante deberá de observar lo que ahora sucede en Francia, donde encabezados por su presidente, los escandalosos sueldos de los diputados fueron rebajados un 40%, se terminaron los lujos y los vehículos blindados de la alta burocracia, estas y otras medidas hicieron bajar la inflación y permiten una economía sana y alejada de derroches y gastos innecesarios y superfluos.
En México, ENRIQUE PEÑA NIETO, deberá de acabar de una vez y para siempre con burócratas que con brutal impunidad se aprovechan de su privilegiada posición para convertirse en nuevos ricos en un país en donde cada día crece el número de mexicanos en extrema pobreza.
PEÑA NIETO, una vez completamente recuperado de su reciente intervención quirúrgica, deberá de visitar Tamaulipas y conocer en carne propia y viva voz de sus habitantes, que queremos recuperar la paz y la tranquilidad perdida, que ningún gobernante estatal puede solo en la lucha contra el crimen organizado.
EGIDIO TORRE CANTÚ, requiere ser visto, oído y comprendido por la alta burocracia federal, para que conozcan los alcances de este gran Estado.

La inversión federal es urgente, PEÑA NIETO no deberá de regatear el apoyo de la Federación al pueblo de Tamaulipas, por eso es urgente y vital que el Presidente de todos los mexicanos programe con carácter de urgente su visita a nuestra entidad.

rafadpineyro@hotmail.com