La actriz Irene Azuela, foto (Instagram)

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Irene Azuela ha visto cobrar vida al emblemático Kit Kat Club de la obra Cabaret en Londres y hace 20 años cuando se montó en México.

Ha gozado las versiones donde trabajaron Sam Mendes y Alan Cumming, pero ella está por hacer algo que jamás ha presenciado como público: transformar al maestro de ceremonias, The Emcee, en mujer.

Desde hace años que a la actriz le habían hablado de la posibilidad de realizar el montaje, pero fue hasta el año pasado que le plantearon la oportunidad de tomar el personaje que acompaña permanentemente al público en el cabaret, y los ojos le brillaron.

Aquel cambio de género no estaba planeado por el equipo creativo, pero Azuela se presentó ante ellos caracterizada y los convenció, algo que la protagonista de la película Quemar las Naves cree que representa el mismo arrojo que tiene su rol, con el que estrena temporada el 14 de marzo en el Teatro de los Insurgentes.

"El Emcee tiene por naturaleza ser atrevido, nuestra apuesta en este atrevimiento tiene que ver con la neutralidad del personaje. El personaje la encuentra en la moral, en las ideas, en la sexualidad.

No es el género el que le está definiendo porque no importa lo que seas o cómo lo seas, siempre y cuando seas libre.

"Este personaje pide que goces la vida, te des cuenta que este momento es valiosísimo, de que las cosas se van a poner de la chingada, entonces más te vale disfrutar este momento, porque la vida es una", compartió Azuela en entrevista.

La historia se ambienta en Berlín cerca de 1930, cuando el nazismo ganaba territorio. El club, lugar de escape, es testigo de la historia de amor entre el escritor Cliff Bradshaw y la cantante Sally Bowles (que será interpretada por Ilse Salas), estrella del Kit Kat Club, territorio del extravagante maestro de ceremonias, rol que le dio el Óscar a Joel Grey.

El género con el que se crearon personajes clásicos no ha impedido que Azuela pueda interpretarlos, como lo hizo hace menos de dos años al ponerse en la piel de Hamlet.

"El teatro es ese espacio donde la convención va de la mano de la libertad creativa, gracias a que existe nosotros podemos decir: 'Este personaje ahora lo va a interpretar una mujer, ahora el cabaret va a ser de tapices rojos y no necesariamente morados o negros como los hemos visto'.

"Cada que se monta una obra que se conoce tanto como un Hamlet o Cabaret, hay una oportunidad de reinterpretar la historia. No hay una sola manera de hacer un personaje o una obra, el mundo de las posibilidades está ahí, frente a nosotros", resaltó la protagonista de las series Monarca y Las Viudas de los Jueves.

En honor a Tina

La nueva temporada de Cabaret, la tercera ocasión que se monta en México, es la última producción en la que trabajó Tina Galindo, recién fallecida, por lo que Irene Azuela considera que cada función será un homenaje a ella.

"Conocí a Tina en el 2008 haciendo El Buen Canario, estuvimos aquí con John Malkovich y ella estuvo muy presente en esa producción, desde ese entonces le tuve mucho cariño.

"Yo sabía que estaba muy entusiasmada con este montaje porque además se lo sabe de memoria, ya lo había puesto una vez, lo vio quién sabe cuántas veces.

Sé que su corazón estaba puesto en esta producción. Cada noche con cada aplauso nos vamos a acordar de ella", sostuvo.