Suben 167% muertes de mujeres menores

Agencia / Reforma
Monterrey, México (15 julio 2019).- Tras limpiarse el rostro con una toalla ante un calor sofocante, María Beatriz Santiago cuenta que luego del asesinato de "la niña" muchos policías anduvieron rondando la colonia.

"Nada más pasó... no, ni el mes yo creo, de que estuvieron cuidando y ya después ya se fueron", dice la originaria de San Luis Potosí.

"Y ya después resulta que otra vez agarraron a un niño por acá por (la Colonia) Terranova".

Hace dos años, María llegó a vivir a la calle Vista del Águila Real en la Colonia Vistas del Río, en Juárez, a unos metros de la casa azul con número 724, donde hace un año fue asesinada la niña Ana Lizbeth Polina, de 8 años, un crimen que estremeció a la sociedad.

La vivienda está abandonada al igual que las de ambos lados.

Las cubren cúmulos de maleza.

El domingo 15 de julio del 2018, Anita fue raptada en una plaza frente a una caseta de camiones, donde su mamá trabajaba.

Su búsqueda inició 12 horas después porque la Policía de Juárez no dio aviso a la Fiscalía General del Estado, y el martes 17 de julio la encontraron muerta en un terreno baldío.

Todo ocurrió en esta colonia, en una distancia de unos 300 metros.

El Vicefiscal de Ministerios Públicos, Luis Orozco, indica que Juan Fernando Ruiz Ramos, prófugo desde 2014 por otro crimen y detenido la madrugada del 19 de julio del 2018, fue vinculado por feminicidio y secuestro agravado.

El 6 de agosto desahogarán su juicio y podría ser sentenciado a 140 años de prisión.

"Hay información bastante sensible para la familia y para la víctima que me hace difícil poderle compartir mayor información", dice el funcionario, al preguntarle por las razones por las que procedió como feminicidio.

"En términos generales le puedo decir que hubo violencia ejercida en contra de la niña por parte de este agresor, y se le imputaron varias de las conductas o circunstancias que establece el Código Penal para los casos de feminicidio".

La Fiscalía General del Estado registra que de enero a junio de este año van ocho muertes violentas de niñas o adolescentes, y en el mismo periodo del año pasado hubo tres.

Además, confirman que en lo que va del 2019, cuatro de estos crímenes fueron vinculados como feminicidios, que es cuando el asesinato de una mujer es por razones de género.

Estos casos son los de una adolescente de 13 años, a quien su novio le disparó en Anáhuac, en mayo.

En ese mismo mes una niña de 2 años fue acuchillada por su media hermana, de 16, en Pesquería.

Hay otros dos feminicidios contra bebés de 1 año, en ambos se acusa a las mamás por matarlas a golpes.

Uno sucedió en febrero, en Allende, y otro en abril, en García.

De acuerdo a la organización Save the Children, en México cada día mueren tres niñas, niños o adolescentes a causa de la violencia.

Luego del feminicidio de Anita, su familia ya no regresó a la casa donde vivían en Vistas del Río.