Monterrey, México (15 marzo 2024)

Como si fuera su primera vez en Monterrey, aunque en realidad fue la última, Moderatto sacó chispas a su concierto del adiós ante "los malditos pecadores" regios.

El grito de batalla se Brian Amadeus (Jay de la Cueva): "¡el detector de metal!", nunca fue tan poderoso como anoche porque fue la última vez que retumbó en la Ciudad en el Adiós Amigos Tour que marcó el cierre de los 23 años de historia de la banda de pop rock.

La esperada cita con Moderatto fue en un atiborrado Auditorio Citibanamex, testigo aquí de la última página de las aventuras musicales del grupo integrado desde 2001 por Brian Amadeus, Roy, Mick Marcy, Xavi Moderatto y Elohim Corona.

Desde la aparición de la banda en el escenario, a las 21: 35 horas fue una noche de contrastes porque por un lado se vivió la algarabía del concierto, también fue tristeza por el adiós.

En un recorrido por sus más de dos décadas de rockanrolear, la banda que parodia a grupos como Kiss, Mötley Crüe, Twisted Sister y Poison, presentó lo más selecto de su discografía.

Como intro presentaron "Quemándome de Amor": dos cobras gigantes adornaron el escenario de los "malditos pecadores" que darán su último show el 23 de marzo en el Palacio de los Deportes en CDMX.

De su repertorio original cantaron "Zodiaco", "Si Mi Delito Es Rockear", "Sentimettal" y "Mil Demonios".

Y como su sello siempre fue el de reversionar al rock covers pop, presentaron "No Podrás", de Cristian Castro; "Como Quien Pierde una Estrella", de Alejandro Fernández; "Sálvame", de RBD; "Quiero Rock", de Menudo; "Isabel", de Luis Miguel, y "Amor Prohibido" de Selena Quintanilla.

"Necesito tu energía más que nunca Monterrey. Necesito ruido", gritó el cantante, y todo fue un manicomio de alaridos.

"Nos sentimos muy emocionados de estar esta noche, que nos acompañes aquí es muy especial para nosotros. Gracias por tantos años de hacer nuestros sueño realidad".

Explosiones de fuego, como ya es costumbre en el grupo, adornaron el espectáculo del adiós en el que tuvieron como guitarrista a Adrián Toussaint y tres "moderetts" (coristas/bailarinas).

Otra costumbre que anoche Moderatto cumplió fue invitar a un fan a cantar con ellos; la afortunada fue una joven llamada Ana Sofy, quien unió su voz a la de Brian Amadeus "No Hay Otra Manera".

El espectáculo alcanzó su clímax con la versión rockera de "La Llamada de mi Ex", original de la Arrolladora Banda El Limón.

"El tiempo pasa, los minutos se están acabando, es muy difícil decirte adiós Monterrey. Vamos a convertir esto en un hospital psiquiátrico", propuso el cantante.

Para la etapa final dejaron lo que llamaron "el himno de la infidelidad": "Ya lo Veía Venir".

Por ser el adiós, Brian estuvo muuuy complaciente porque les hizo el sueño a varios fans, cuatro subieron a tocar la guitarra, dos la batería, uno el bajo y le prestó su micrófono a un cantante.

Eso fue una reverenda locura.

"Esta noche terminó, pero esta historia que hicimos juntos quedará por siempre malditos pecadores", anunció Brian seguido de una estruendosa explosión.

Los chillantes gritos de los regios regresó a Moderatto al escenario con "Hechizo de Amor" y "Autos, Moda y Rock And Roll".