
Faltas que afectan la seguridad en la escuela, desde las consideradas "moderadas", como realizar apuestas o utilizar objetos en situaciones que no corresponden a fines educativos, hasta las "muy graves", como la agresión sexual, están definidas en el reglamento escolar oficial.
Este documento contiene, además, las respectivas medidas disciplinarias.
También existen protocolos escolares que dictan qué hacer en el centro educativo en caso de accidentes, disturbios o presencia de armas de fuego, así como guías que dictan cómo actuar ante un caso de abuso sexual infantil, acoso, ciberacoso, incluso alguna conducta suicida por algún estudiante.
Sin embargo, de manera general, el profesorado desconoce estos lineamientos, coincidieron directivos consultados.
Al mismo tiempo, cuando la violencia escolar escala o sube de todo, hay quienes entran en un dilema.
"Un niño en mi salón tenía un arma blanca", contó un directivo en condición de anonimato. "Era de quinto grado. Ya íbamos a mandar citar a su papá, y un intendente me dice: '¿sabes de quién es hijo?'.
Es tal persona que anda en esto. ¿Para qué nos metemos en problemas?".
A nivel secundaria, relató el profesor, pasa mucho que los alumnos lo expresan directamente y sin dudarlo: "Si usted me reporta, yo hago esto. Yo conozco a tal (persona)".
LOS 'MUY GRAVES'
La violencia en las escuelas es como un monstruo de infinidad de cabezas que muchas veces queda invisibilizado en las aulas y por los maestros ante la probabilidad de "meterse en más problemas".
No obstante, en otras, se asoma a la luz pública.
La alerta llegó a un punto álgido el mes pasado, cuando un grupo de estudiantes de preparatoria de TecMilenio Las Torres protestó públicamente por el presunto abuso sexual contra uno de sus compañeros por parte de otros estudiantes en la misma institución.
El "Reglamento de Disciplina Escolar" que aplica para planteles públicos y privados, desde educación inicial hasta media superior, está vigente desde 2012 y contempla la descripción de más de 40 faltas clasificadas como leves, moderadas, graves y muy graves, desde educación inicial a media superior.
Cada centro educativo elabora su propio reglamento, pero basado en el oficial.
Entre las faltas "muy graves" que marca, está realizar actos de agresión sexual, en forma individual o en grupo, u obligar o forzar a otros a participar en una actividad sexual.
También, la posesión, consumo o distribución de sustancias tóxico-adictivas como cigarros, bebidas alcohólicas o drogas, además de la posesión o uso de un arma blanca o arma de fuego.
Las medidas disciplinarias que pueden aplicar para cualquiera de estas conductas incluyen el exhorto al padre para que lleve a su hijo o hija a recibir atención en alguna institución especializada; reparación del daño y actividades académicas adicionales entre 5 y 10 días en horario de clases.
"En caso de ser necesario, en coordinación con el padre, madre o tutor, informar a las autoridades correspondientes sobre la falta o infracción clasificada como grave o muy grave", indica el documento.
"Y el traslado a otro plantel educativo".
Otro documento, la "Guía de prevención y de detección temprana y protocolos de actuación en casos de: Abuso sexual infantil, acoso y/o violencia escolar, y maltrato infantil y conducta suicida", incluye en su definición de violencia escolar a las redes sociales y espacios en los alrededores de las escuelas.
También establece que docentes, directivos, personal administrativo, supervisores, inspectores y los padres de familia deben conocer y aplicar estos documentos.
Indica, además, que "guardar silencio sobre un acto de abuso sexual infantil, acoso y/o violencia escolar, maltrato infantil, o cualquier otro delito en contra de un educando implica corresponsabilidad por omisión".
'IMPLICA MÁS JALE'
La directora de una secundaria en el sector San Bernabé dijo que el acoso escolar y el ciberbullying son actualmente los tipos de violencia escolar más frecuente.
"Existe un alto índice de acoso en general en la mayoría de las escuelas del área metropolitana", indicó.
"Los estudiantes comienzan a molestarse por algo que comentan en alguna red social y reaccionan, y empiezan los problemas. Llegan a la escuela ya molestos, se hacen de palabras y hasta golpes a la hora de la salida".
Aunque ella en particular sí ha utilizado los protocolos, reconoció que maestros y directivos no conocen en su totalidad estos documentos.
"Hace falta difundirlos a través de los consejos técnicos dando un espacio para su análisis y aplicación", sugirió.
"Tenemos que hablar a los padres de familia para enterarlos y hacer conferencias con temas alusivos al acoso en todas sus manifestaciones para concientizar a los alumnos.
"Tener escuelas para padres, mesas redondas con supervisores y directivos, y directamente con el alumnado para que conozcan las consecuencias de sus actos".
Otro profesor consultado, del municipio de Juárez, reconoció que la carga de trabajo en los docentes es uno de los obstáculos para dominar el uso de los lineamientos, mientras que un director de una secundaria en Guadalupe mencionó que es importante también seguir los protocolos de prevención.
Es decir, respaldan todas las acciones y prácticas para disminuir los riesgos de que ocurra un acto de violencia en el plantel, desde buzones para denuncias hasta conferencias con cuerpos de seguridad, como la Policía Cibernética.
"Pasen o no pasen las cosas eso ha beneficiado bastante, porque hemos disminuido los índices de violencia", dijo el director.
"¿Implica más jale? Claro, pero si llega a pasar un incidente, yo me puedo amparar de que yo estoy actuando a priori".
PARA CONSULTA
Reglamento de Disciplina Escolar. Incluye definiciones de más de 40 faltas en que pueden incurrir los estudiantes, desde preescolar hasta nivel media superior.
También describe las sanciones disciplinarias.
Guía de prevención y de detección temprana y protocolos de actuación en casos de: abuso sexual infantil, acoso y/o violencia escolar, y maltrato infantil y conducta suicida.
Orienta a la comunidad educativa en su actuación ante este tipo de problemáticas, con criterios y mecanismos de prevención, identificación, atención y seguimiento, con el apoyo de instituciones.
Y también disponible:
Manual y protocolos de seguridad escolar. Establece los pasos a seguir en una lista de situaciones como accidentes o lesiones en la escuela, robo o vandalismo a centros educativos.
Amenaza de bomba o amenazas en general en la escuela. Presencia o lanzamiento intencional de arma de fuego, objetos explosivos o inusuales en el plantel. Disturbio o despliegue de fuerzas de seguridad y extorsión telefónica.