
Agencia Reforma
En el último fin de semana de vacaciones de verano, los viajeros mexicanos saturaron los puentes de Reynosa para realizar las compras escolares antes del regreso a clases de este lunes.
Contrario a los puentes de Matamoros y Nuevo Laredo, que no registraron aglomeraciones en sus cruces binacionales, en Reynosa toda la mañana los puentes para cruzar hacia Mission o Hidalgo, Texas, estuvieron saturados.
Las filas de vehículos eran principalmente de Nuevo León y Tamaulipas. Sin embargo, también hubo algunos de Texas, de paisanos y turistas estadounidenses que iban de regreso a sus casas.
El principal congestionamiento se registró en el puente Anzaldúas donde los conductores tuvieron que hacer hasta dos horas de fila. Ya por la tarde el promedio de espera bajó a 70 minutos.
Por el cruce Reynosa-Hidalgo el tráfico fue constante y fluido.
Ahí el personal de Aduanas le dio agilidad a la revisión vehicular, pero aun así el promedio de tiempo en fila alcanzó la hora.