En la Oponión

Pbro. Miqueas Cantú Mtz

Elegir la paz

Lo que nunca imaginamos vivir, hoy a través de esta cuarentena extendida lo estamos experimentando. Sin poder salir a lugares públicos, nos vemos obligados a estar en casa.

Aunque algunos han visto una oportunidad de crecer personalmente para otros el resumen de esta etapa es caos. Ahora con el regreso a clases le dimos la bienvenida a una nueva rutina, nuevas rutas y nuevos momentos que durante el día se van presentando produciendo estrés, afán y ansiedad en muchas casas.
Es impresionante las estadísticas negativas que este virus ha traído, millones de personas sin trabajo, la violencia aumentó considerablemente, la ansiedad y estrés se hacen presente en muchas familias.

Todo esto nos hace ver que es imposible tomar las cosas de otro modo.
Miguel Limardo, cuenta una historia que le titula La tempestad por dentro: Un célebre pintor moderno le ha dado a uno de sus cuadros el título de La tempestad, representa una embarcación navegando en un mar tranquilo.

Sobre cubierta representa a un grupo de personas en una fiesta. La pregunta obligada es ¿dónde está la tempestad? Todo se ve tranquilo, el mar, las personas y el ambiente está en aparente calma.

Pero a poco de examinar el cuadro se puede observar a través de las claraboyas se asoman unos rostros agónicos y atormentados. Este lienzo es la estampa de un barco negrero de a principios del siglo pasado.

Mientras unos cuantos están en cubierta distraídos y alegres, otros son infelices sufriendo los embates de la esclavitud. La tempestad está en las profundidades del barco.
Esta cuarentena ha ocasionado que esta pintura se haga realidad en muchas casas.

Por fuera la apariencia de una continua fiesta, pero por dentro una tempestad marcada por el estrés y la ansiedad.
La Biblia nos marca un camino de esperanza, en el evangelio de Juan dice:
Les he dicho todo lo anterior para que en mí tengan paz.

Aquí en el mundo tendrán muchas pruebas y tristezas; pero anímense, porque yo he vencido al mundo.
Juan 16:33 NTV
Este texto no dice que la paz no está en lo material ni mucho menos es un momento, la paz que necesitamos en tiempos de tempestad es una persona.

La paz es Jesús, y podemos experimentarla cuando confesamos y confiamos en su obra a favor de nosotros. Este es el tiempo de elegir la paz, elegir a Jesús es elegir la paz que sobre pasa todo entendimiento pero es para todo aquel que confíe en Él.
Este inicio de semana elija la paz.