En la Oponión

Pbro. Miqueas Cantú Mtz

0
Votos
Nota Aburrida
Nota Interesante
La fuerza del amor

domingo, 9 de agosto de 2020
Comparte esto en Facebook
Comparte esto en Twitter
Comparte esto en Digg
Enlarge Font
Decrease Font
En el contexto bíblico hay un cántico excelso dedicado al amor, que explica, detalla y enfoca el poder que puede ejercer.
... Porque fuerte es como la muerte el amor; Duros como el Seol los celos; Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama.
Cantares 8:6 RVR1960
Que impresionante que se pueda contar con algo que es más fuerte que la muerte, aunque este canto está inspirado en una relación humana, Jesucristo el hijo de Dios demostró que el amor es más fuerte pues él murió por causa de nosotros pero la venció al resucitar al tercer día.
Puede sonar a cliché, pero en estos tiempos peligrosos y críticos que estamos viviendo lo único que nos puede guardar es el amor divino, pues este amor es algo más que un sentimiento, es un compromiso determinante por entregar todo, (su Hijo Jesús) por una humanidad perdida.

Cuando aceptamos ese gran amor, hay cambios considerables en nuestro interior, tal fuerza tiene que es capaz de darnos valor, propósito y destino. Es por eso que en medio de temores por una realidad apabullante, en medio de la desesperación que produce la cuarentena, en medio del dolor que produce las relaciones rotas, el amor de Dios nos trae esperanza y capacidad de comenzar de nuevo.
Hay una historia que cuenta Rodolfo Loyola, que nos relata la fuerza del amor.
Se trata de un hombre llamado Eliezer, que pertenecía a un grupo radical comunista que hacían trabajos especiales de espionaje para el gobierno de Cuba.

En una de esas misiones fue asignado a una iglesia cristiana porque tenían sospecha que se dedicaban a dar discursos revolucionarios. Cuando llegó, se hizo pasar por alguien que necesitaba de Dios, con el tiempo se integró en sus actividades, pero a veces se incomodaba porque sólo veía sinceridad y nada de revolución.

Pero todo cambió en su interior cuando enfermó de gravedad y tuvo que ser hospitalizado por diez días, tiempo en el que los miembros de la congregación lo visitaron, le llevaron comida y hacían oraciones.

Cuando salió recuperado le dieron la bienvenida y dieron gracias a Dios por su vida. Cuando él vio todo este amor sacrificial que hicieron por él, tomó la decisión de compromiso con Dios y renunciar a su trabajo.
El amor es más fuerte, pruébelo al seguir a Jesús y verá los resultados.
Buen inicio de semana.

 

Opina sobre este artículo

Nombre   Email  
Título
Opinion

Columnas Anteriores