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Ante el aumento de casos por coronavirus en Texas, las autoridades advirtieron que la capacidad hospitalaria podría llegar a su límite en dos semanas, en medio de una propagación acelerada en más de la mitad de Estados Unidos.

La situación luce también complicada en Arizona y Florida, donde algunos centros de salud reportaron que sus unidades de cuidados intensivos están cerca de llenarse de pacientes con Covid-19, según muestran los datos oficiales.

"Si no cambiamos la trayectoria (de contagios diarios), estamos a dos semanas de que se saturen nuestros hospitales", sostuvo el Alcalde de la ciudad texana de Austin, Steve Adler, en CNN.

Advirtió que las unidades de cuidados intensivos podrían alcanzar su límite incluso antes, en unos 10 días.

El Alcalde de Houston, Sylvester Turner, emitió el mismo aviso en CBS, y señaló que la demanda de pruebas de coronavirus excedía la capacidad de la urbe, donde aproximadamente uno de cada cuatro tests da positivo.

Se han identificado casi 200 mil casos en Texas, con un máximo diario de 8 mil 100 contagios el miércoles.

Houston Methodist, un sistema de ocho hospitales de primer nivel, tuvo casi 400 pacientes hospitalizados con Covid-19 a finales de junio. Este fin de semana, siete días después, la cifra fue de 626, a pesar de que los médicos intentaron ser conservadores al admitir enfermos y dar de alta a otros tan pronto como pudieron.

Su principal centro de salud agregó 130 camas en los últimos días y las llenó rápidamente.

Ahora, los administradores estiman que el número de personas internadas en todo el sistema podría llegar a 800 o 900 en las próximas semanas, y planean acomodar hasta mil.

Por su parte, el Departamento de Salud de Arizona, entidad que suma casi 100 mil contagios, indicó que el 90 por ciento de las camas de unidades de cuidados intensivos estaban en uso en la víspera, frente al 60 y 70 por ciento durante marzo y abril.

La Alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego, lamentó la prisa con la que la capital del estado reabrió, y manifestó que la urbe enfrenta además una crisis de pruebas de coronavirus, con personas esperando en filas por ocho horas en sus autos para averiguar si estaban infectados.

En tanto, expertos y funcionarios de salud pública cuestionaron en la víspera la afirmación del Presidente Donald Trump de que el 99 por ciento de las infecciones por el virus en Estados Unidos son "totalmente inofensivas".

El ex comisionado de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) el doctor Scott Gottlieb dijo que entre el 2 y el 5 por ciento de las personas contagiadas se enferman lo suficiente como para requerir hospitalización.