Por: Claudia Cuevas
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Guadalajara, México (02 agosto 2019).-
Una gesta heroica en Rusia permitiría que México regrese a los Juegos Olímpicos en el voleibol femenino sin tener que jugarse la vida en su última oportunidad.
Desde 1968, que el País recibió la justa olímpica y se ganó un lugar gracias a la localía, México no ha vuelto a competir en unos Juegos.
En este ciclo con la mejor representante tricolor en las duelas -la jalisciense Samantha Bricio- se espera que el anhelado boleto llegue, aunque, para ello, tendrían que derrotar a Rusia, Corea y Canadá en una competencia de tres días, en la que se enfrentarán todos contra todos por un pase.
"Va a estar difícil.
Una característica de Rusia es que están enormes, siempre. No importa qué categoría, no importa qué tiempos, siempre están enormes, entonces es un poquito difícil.
Las de Corea son muy rápidas, pero están un poquito a nuestra altura. Canadá tiene un equipo muy joven. Entonces, yo creo que los tres estamos al parejo", dijo Bricio a CANCHA.
El Preolímpico se llevará a cabo durante los próximos días en seis países diferentes con cuatro equipos por nación y una cuota olímpica en disputa por cada sede.
Los ganadores de cada sector se sumarán a Japón que, como anfitrión, ya tiene su lugar asegurado.
Las cinco plazas restantes se entregarán por zonas en los próximos meses.
Ahí, en el NORCECA, México tendría su última oportunidad de llegar a Tokio.
"Nos falta mucho para estar al nivel de las potencias.
No necesitamos jugadoras de otro planeta, creo que aquí en México hay bastantes. El chiste es un poquito más de apoyo y un poquito más de coordinación entre los estudios y el deporte, que no tengan que elegir entre uno u otro", comentó la tapatía.
La selección llegó a Rusia desde el miércoles y en su parada en San Petersburgo se llevaron la sorpresa de que la Federación no les había reservado el hospedaje.
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