CD. DE MEXICO
/REFORMA
Cristina Fernández de Kirchner sorprendió a los argentinos al no presentar su candidatura a la presidencia, aunque muchos creen que su aspirante al cargo será una marioneta.
El precandidato Alberto Fernández, a quien la ex Presidenta acompaña como Vicepresidenta en su fórmula, dijo ayer que no es un títere de su segunda de lista, como aseveraron ayer sus críticos cuando se conoció la candidatura. "Muchos decían que ejercía una gran influencia sobre ella en esta etapa y ahora creen que soy un títere.
No soy ni una cosa ni la otra", afirmó Alberto Fernández. El que fuera ex jefe de gabinetes kirchneristas entre 2003 y 2008, que en el pasado tuvo diferencias con Fernández que culminaron en su salida del Ejecutivo, aseveró que cuando tuvo problemas con ella se marchó y que la criticó cuando lo creyó necesario. Recalcó que en un Gobierno es el Presidente el que toma las decisiones pero reconoció que es esencial que la ex Mandataria esté con él. "Si Cristina no me hubiera acompañado, no sé qué hubiera dicho, pero para mí es esencial porque Cristina es la referencia central de la política argentina", analizó. Preguntado por la inusual decisión de la antigua jefa de Estado para concurrir como Vicepresidenta, Alberto Fernández lo atribuyó a su generosidad para con Argentina. "Cristina cree que yo sirvo más para este momento que ella, siente que la Argentina de hoy no es igual que la que le tocó a ella", consideró. La candidatura de Fernández-Fernández se lanzó este sábado en un vídeo en el que la actual senadora reconoció que los dirigentes deben dejar de lado las ambiciones y las vanidades personales y por eso se mostró dispuesta a aportar desde el lugar que pueda ser más útil. La política argentina se enfrentará mañana por primera vez a un juicio por presuntos hechos de corrupción.