Derribando los miedos

Con una determinación admirable, un pequeño de 5 años de edad, hace tres años incursionó en las artes marciales. Disciplinado y confiando en todo momento en la palabra de Dios, Valeriano Elizondo Fernández, posee hoy en día una larga lista de triunfos, que lo han llevado a destacar no solo en Texas, sino en Estados Unidos.

Arropado por el amor de su familia, sus papás Valeriano Elizondo y Selene Fernández, sus hermanitos, Emilia y José Pablo Elizondo Fernández, y con la formación de su entrenadora Brenda Castillo, Valeriano ha conseguido afrontar sus temores de manera victoriosa, predominando siempre el respeto hacia el prójimo.

El jiu-jitsu brasileño o BJJ por sus siglas en inglés (Brazilian jiu-jitsu) es un arte marcial que consiste en llevar a un oponente al suelo para establecer una lucha.

El BJJ permite una amplia variedad de técnicas de lanzamiento y derribo. Una vez que el oponente está en el suelo, se emplean una serie de movimientos para manipular al contrincante en una posición adecuada para la aplicación de una técnica que permita la victoria.

A su corta edad, Valeriano ha sobresalido en el jiu-jitsu brasileño, siendo uno de los competidores más destacados de Texas, habiendo ganado más de 40 medallas y 3 cinturones de los torneos más prestigiosos que existen en el mundo, NAGA, Five Grappling y BFA.

Su récord es de 0 empates, 20 derrotas y 104 combates ganados.

En entrevista concedida para Revista Status, Valeriano Elizondo padre, nos habló de la historia y formación como atleta de su hijo, un caso de éxito deportivo.

¿Fue iniciativa de Valeriano practicar jiu-jitsu?

Así es. Yo entrenaba en una academia en Reynosa y él me acompañaba a mis prácticas y le llamaba mucho la atención. Por otro lado, a él no le gustaba que los niños le hicieran bullying y ese tipo de cuestiones que se viven ahora, entonces dijo que quería aprender.

Fue entonces que les pregunté a mis entrenadores que me recomendaran a alguien en la ciudad de McAllen, donde vivimos, que hablara español, y fue como llegó a la academia Enzo Jiu Jitsu de Brenda Castillo.

Desde que inició a los 5 años de edad, siempre ha estado Brenda con él, ella fue la primera que lo recibió y que lo empezó a entrenar.

Llegó temeroso, al principio lloraba, él quería entrenar pero no quería pelear aunque fuera práctica, estaba muy nervioso.

En el primer torneo que tuvo le ganó el miedo y se puso a orar, y ahora ya es normal el entrenar y competir.

¿Qué es lo que siente antes de iniciar una batalla?

Tiene muchos nervios, lo que lo tranquiliza es rezar. Se ve muy seguro, sus contrincantes lo ven así, pero por dentro tiene el estómago revuelto.

Siempre nos pide que estemos rezando, él es muy católico, tiene mucha fe a la oración.

¿Cómo fue la preparación para el torneo de Las Vegas?

Con la experiencia de más de 40 torneos llegó a esta competencia internacional anual de campeonato de niños que realiza la Federación Brasileña de Jiu Jitsu, la más grande y prestigiosa que realiza un evento especial para niños.

Hay 2 muy importantes, los Panamericanos y este campeonato internacional que se llevó a cabo en Las Vegas, Nevada, anteriormente había sido en Long Beach, California.

Él ya había competido anteriormente representando a México y había quedado en segundo lugar, de hecho una final fue contra un japonés, quien le ganó por puntos, no por sumisiones, pero ahora le tocó llevarse la medalla de oro en la categoría de 8 años, peso ligero de cinta gris y a nivel internacional, ya que vienen niños de todo el mundo.

Realmente es un logro importante ya que es muy contada la gente que tiene un título de estos en el Valle de Texas y en Reynosa, nadie.

¿Hubo algún tipo de eliminatoria previa para lograr el pase a la competencia internacional?

Para poder entrar en la competencia en Las Vegas necesitas estar dado de alta ante el registro de la Federación y es la academia la que te da de alta y ésta misma decide quienes son sus mejores peleadores, no necesitas tener nada más que eso, lógicamente que el competidor debe estar calificado, ya que es muy delicado el que una academia mande a un niño que no esté lo suficientemente preparado porque si resulta con una lesión severa lo más probable es que a esa academia ya no la dejen participar en torneos.

¿Qué otras importantes preseas o trofeos tiene en su haber?

El cinturón de la Battle For the Ages (BFA), una muy reconocida competencia de Texas que se realiza en la ciudad de Dallas, en la que se invita a participar a todos los campeones del estado, de todas las categorías.

El poseedor de ese cinturón es porque ha logrado el nivel más alto de su categoría, es un estatus el tener ese cinto que de hecho nada más en todo el Valle hay dos personas que lo tienen, Valeriano y un compañero de él, de once años.

¿Que tiene que hacer un niño para lograr resultados excelentes en esta disciplina como en el caso de Valeriano?

Yo creo que lo más importante es el entrenamiento y la constancia. Él adquirió una disciplina de que de lunes a jueves no falta, y en ocasiones acude también los fines de semana ya que es una tradición que tienen las academias denominada ´open mat´, donde básicamente invitan a alumnos de cualquier otra academia y tienen un match amistoso, entonces se ve uno contra otro, un round de 3 minutos, tipo retas y te ayuda porque cuando tu tienes mucho tiempo en la misma escuela ya conoces las habilidades de tus compañeros y en jiu-jitsu competir con alguien desconocido con otras habilidades te permite avanzar, es un juego de ajedrez humano, básicamente sí se requiere de mucha inteligencia y habilidad.

En cuanto a su formación y desarrollo, ¿en qué le ha ayudado practicar este deporte?

Adquirió una disciplina enorme, mucho auto control. Algunas personas me preguntan que si no tengo problemas con él en cuanto a que sea agresivo con otros niños, y sinceramente no, núnca he tenido alguna queja en la escuela de mala conducta, sino todo lo contrario, es muy tranquilo, este deporte le da mucha seguridad, sabe que no necesita demostrar nada.

¿Vienen más competencias?

Si. Valeriano tuvo su primera competencia profesional en Corpus Christi, eso lo puso muy nervioso porque tuvo que caminar solo hacia el cuadrilátero mientras todo los veían y le aplaudían, él salió con la bandera de México mientras se escuchaba su canción de introducción, entonces si fue una experiencia intimidante, pero gracias a Dios salió victorioso y va a tener otra pelea profesional ahora el 19 de octubre, en Brownsville, Texas.

También participará en un campeonato No GI en Dallas, modalidad Grappling, es un tipo de lucha, pero es muy semejante al jiu-jitsu, y se enfrentará contra campeones tejanos.

¿Cuáles son los sentimientos de ustedes como padres cuando lo ven compitiendo en esos niveles?

Un orgullo que no se puede explicar, siempre he estado muy contento, pero esta última pelea que ganó en Las Vegas y que representa un triunfo a nivel mundial es algo increíble, yo estaba rebosante de felicidad, lo abracé y hasta las lágrimas se me salieron de la emoción y es que tener a un hijo campeón mundial no es cualquier cosa, entonces lógicamente estaba que no cabía del orgullo, es algo impresionante.

Los esfuerzos y sacrificios que él ha hecho por este deporte son muchos, entonces es una recompensa muy grande, una satisfacción enorme.

¿Qué planes tiene Valeriano para el futuro?

Seguir en esta disciplina, él quiere llegar a ser campeón mundial en un futuro, ya cuando entre en la competencia de los adultos, pero pues hay que ver qué le depara el destino, por lo pronto seguirá entrenando con muchas ganas y disciplina para seguir compitiendo.