La Iglesia católica en Venezuela condenó el atropellamiento del Estado de derecho y las libertades por el Gobierno de Nicolás Maduro. Foto: EFE

La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), acusó este lunes al Gobierno de Nicolás Maduro de querer instaurar una espiral de violencia en el país y de promover el resquebrajamiento de la justicia.
Los Obispos señalaron que en el país sudamericano se violan las leyes y se atropella el Estado de Derecho.
A través de un comunicado, que se produce en medio de las investigaciones y detenciones por el atentado a Maduro el pasado 4 de agosto, se señala que todo lo que tiene que ver con la justicia se está saliendo del control de las leyes para enmarcarse en la persecución física y el amedrentamiento.
"Perseguir, someter y enjuiciar arbitrariamente, es el componente que se observa, mientras hay una multitud de pueblo que pide alimentos, medicamentos, luz eléctrica, transporte público, gas, sueldos dignos y detener la inflación", dijo la CEV.
El Episcopado lamentó que quienes se sienten con poder utilicen la violencia represiva e instó a los ciudadanos a no sucumbir ante esta realidad dolorosa y a seguir en la búsqueda de la verdad.
"La protesta cívica, la organización comunitaria, la unidad como pueblo, el reclamo legítimo del buen funcionamiento de los servicios públicos que les pertenecen al pueblo, son acciones que están avanzando", recalcó el Episcopado en el texto.
De acuerdo con la Conferencia, la dignidad de la persona y los derechos fundamentales inherentes no pueden negarse nunca y por lo tanto quien es privado de libertad tiene derecho a la integridad física y psicológica y a las relaciones familiares y sociales.
El pronunciamiento se produjo al mismo tiempo en que la Oposición venezolana denunció la detención del diputado, Juan Requesens, acusado del atentado contra Maduro, ha sido sometido a tratos crueles y se le ha negado la visita de sus familiares y abogados.
En el texto, la Iglesia también reiteró que se busca ejercer un control social y que las autoridades venezolanas están promoviendo el quiebre de la disidencia.
La semana pasada la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Venezuela pidió al Gobierno de Maduro cesar la represión violenta contra los ciudadanos tras el atentado, e instó a los grupos defensores de los derechos humanos a estar atentos ante posibles violaciones.
Este lunes la CEV exhortó a los organismos de seguridad del Estado a cambiar su actitud y a entender que el país está en un momento de grandes sacrificios y sufrimientos, por lo que reiteran su petición sobre cesar la represión.
"Acompañen a este pueblo que no tiene otra alternativa sino la de buscar ser escuchado en sus necesidades", añadió.