Toma Óscar Forma del Agua

Eduardo Molina/EL NORTE
Los Ángeles, Estados Unidos (05 marzo 2018).- En una noche con muchos toques mexicanos, un Guillermo del Toro emocionado y con el Teatro Dolby rendido ante él se llevó los principales premios Óscar con su cinta "La Forma del Agua".

Es el tercer mexicano en los últimos cinco años en ganar por Mejor Director y el segundo en el de Mejor Película.

Además, su película obtuvo los premios por Música Original y Diseño de Producción, de las 13 categorías en las que competía.

En la ceremonia 90 del Óscar, el nombre de México se mencionó múltiples veces por la presencia de figuras nacionales como Gael García, Salma Hayek, Eugenio Derbez, Natalia Lafourcade y Eiza González.

Además, destacó el triunfo de "Coco" por Mejor Película Animada y Mejor Canción: "Recuérdame", tema de la cinta que rinde tributo a la cultura mexicana y su tradición del Día de Muertos.

Cuando recibió el premio de Mejor Director, Del Toro debió contener las lágrimas.

"Lo mejor que hace nuestro arte, y nuestra industria, es borrar las líneas en la arena", dijo. "Deberíamos seguir haciéndolo cuando el mundo nos diga que las hagamos más profundas".

Más tarde, el cineasta llegó relajado a la sala de prensa, donde hizo reír con sus ocurrencias.
Aclaró que todavía le faltan personas a quienes agradecer.

"Tengo muchos primos", bromeó.

En la ceremonia, al subir por la estatuilla de Mejor Película reveló: "Hace unas semanas Steven Spielberg me dijo: 'Si llegas al pódium, recuerda que eres parte de nuestro legado, una parte de nuestro mundo de cineastas y debes estar muy orgulloso'.

Estoy orgulloso".

En otras categorías no hubo muchas sorpresas: en la de Mejor Actor ganó Gary Oldman, por "Las Horas más Oscuras", y en la de Mejor Actriz triunfó Frances McDormand, con
"3 Anuncios por un Crimen".

En un año donde la mujer tomó en sus manos las denuncias de acoso sexual, la ceremonia no le huyó al tema.

Estrellas como Salma Hayek y Ashley Judd, que denunciaron a Harvey Weinstein, hablaron sobre el valor en el escenario, y McDormand pidió que las mujeres nominadas se pusieran de pie para pedir que se cuenten sus historias.

Fue una ceremonia cargada de inclusión con latinos y afroamericanos.