Clase política no está a la altura de ciudadanos: Sicilia

Su mirada no oculta el dolor de haber perdido a su hijo. Reconoce que no ha sido fácil el camino y mucho menos cuando ha sentido el dolor de los habitantes, de "los que no son escuchados".

Para Javier Sicilia no ha habido ningún cambio desde la muerte de su hijo y de sus amigos, por el contrario, la inseguridad, la impunidad y la corrupción han aumentado, ante la falta de gobernantes que escuchen a los habitantes.

"Sigue existiendo una brecha inmensa entre la clase política, que no está a la altura de la emergencia y la realidad de los ciudadanos; estamos peor que los animales, sin cobijo, sin seguridad, y además si nos matan o desaparecen va a quedar impune, a ese nivel estamos en este país, en el abandono, en la orfandad total", menciona.

Ante la falta de respuesta, el poeta dice que es necesario dar un giro al país y exigir políticos que estén a la altura de la realidad que se requiere, por ello convocará a los candidatos a que asistan al Castillo de Chapultepec, para que conozcan la realidad de los habitantes y se comprometan a cambiar el rumbo.

"Los vamos a emplazar de cara al Castillo de Chapultepec, para que nos digan por qué no al voto en blanco. ¿Qué nos garantizan? Para qué llevarnos a las urnas en las condiciones que nos tienen, con el país destrozado, en la injusticia, gastándose millones de pesos en las campañas, hay zonas del país balcanizadas, las víctimas no existen.

Si no hay justicia y si no hay paz, de qué democracia nos hablan", dice Sicilia. "Sentar a finales de mayo, a principios de junio, a los candidatos en el Castillo de Chapultepec, los vamos a convocar.

Se está trabajando en la agenda, si no quieren los vamos a convocar, los vamos a citar y que queden sus espacios vacíos y que se vea lo que les significamos.

A ver cómo contestan, a nosotros nos tienen que responder, que no se les olvide que esa es otra de las prácticas donde no estamos viviendo: en la democracia, que la soberanía está en el pueblo, en los ciudadanos.

Que los patrones de los funcionarios se llaman: ciudadanía", comenta en entrevista con EL UNIVERSAL. Al recordar los momentos que ha visto y sentido durante las caravanas que ha realizado el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, su voz cambia al no haber conseguido lo que busca el movimiento: paz y justicia.

"No, no hay justicia. Sí hay una ley, hay una justicia pero no hay reparación de daño, no hay justicia, se sigue con 98% de la impunidad, de asesinatos, los crímenes, los levantones van creciendo.

El camino es por la lucha, la justicia y la paz, y es lo que no vemos. De los seis puntos que dimos el 8 de mayo en el Zócalo capitalino, ninguno se ha cumplido.

El único caso que ya estaba resuelto, por lo menos policiacamente, es el caso de mi hijo y sus amigos, pero todavía falta que detengan a una persona y aún no salen las sentencias, no puedo estar frente a un país que sigue desgarrado.

No hay ruta de paz" explica Javier Sicilia. Su preocupación no ha cambiado al obtener pocos resultados, sin embargo, en su mirada deja al descubierto un poco de optimismo, al recordar que el movimiento permitió darle voz a los que no son escuchados.

"Cambios profundos, fue el haber redignificado a mucha gente que estaba no sólo humillada porque el crimen organizado había asesinado a sus hijos a sus padres, sino por la criminalización que el gobierno había hecho de ellos, la criminalización y el maltrato que han hecho las procuradurías, hemos encontrado que estaba devastada absolutamente, con antidepresivos, en cama, a punto del suicidio", dice el poeta.

"Creo que la redignificación de la vida de estas gentes es lo más importante y profundo del movimiento frente a la insensibilidad de la política; no hablemos de la maldad de los criminales, sino de la insensibilidad de las autoridades que deben de impartir justicia.

Los otros han sido logros pequeños, pusimos en conciencia de la nación algo que parecía olvidado, que las víctimas somos seres humanos que necesitan justicia".

Sicilia está seguro de que hay mucha impunidad en los cuerpos de seguridad y dependencias de gobierno, pero a pesar de ello sabe que no se puede quedar admirando "a la clase política", como él le llama, por el contrario, alista una serie de acciones, como una caravana a Estados Unidos en la que se abordarán temas relacionados con las armas, la migración y el consumo de drogas.

(Agencia / El Universal)